Carta de Luis María Videla

Luis María Videla es alumno de 5to año del Nivel Secundario y este año realizó una experiencia de intercambio cultural en Sudáfrica. Aquí compartimos sus palabras:

Me llamo Luis María Videla tengo 17 años y en enero de este año participe en un intercambio a Sudáfrica donde viví la mejor experiencia de mi vida.

La idea del intercambio surgió porque en el año 2014 mi hermana, Magdalena, realizo el mismo intercambio, que ella también lo cambio por su viaje de egresado y al verla volver tan feliz y con tantas lindas historias decidí hacer el mismo intercambio y también cambiarlo por mi viaje de egresado.

Al principio estaba asustado, todos mis amigos me decían que estaba loco, que como iba a cambiar el viaje de egresado por un viaje a otro país, pero me decidí y lo hice junto a un amigo de mi colegio, Martin Palma, quien también se decidió por hacer el intercambio.

El 17 de enero viajé a Córdoba donde estuvimos una noche con mis padres y el 18 de enero salimos desde córdoba  tres argentinos hacia Brasil donde nos encontramos con Martin y 5 chilenos, de Brasil volamos  hacia Capetown donde estuvimos cuatro días y recorrimos Table Mountain, el Cabo de Buena Esperanza, Waterfront , playa y muchos lugares más. Luego de eso nos dividimos todos y cada uno se fue con sus respectivas familias, ahí tuve que volar hacia Johannesburgo junto a otros estudiantes de intercambio donde nuestras familias nos buscaron por el aeropuerto.

La primer noche con la familia estaba muy nervioso pero son muy amigables allá y por ahí los primeros días te cuesta manejarte bien con el inglés pero luego de dos semanas escuchando televisión, radio, hablando todo el día en inglés, mejora y mucho.

Las escuelas allá son inmensas, tienen todos los deportes en la escuela, no hay clubes, tienen rugby, natación, waterpolo, equitación, futbol, criquet, tenis, handball, etc. Todos los deportes que se puedan imaginar, hasta arquería! y allá cada alumno puede elegir sus propias materias, lo cual es muy bueno y cada día veías caras nuevas, también en las escuelas se dividen en tres casas de colores, donde hacen competencias, actúan y tienen días de deportes y juntan puntos para ver cuál es la casa ganadora.

Allá vivía en un barrio residencial inmenso que tenía 800 casas, puerto, canchas de golf, canchas de tenis, gimnasio, restaurantes, TODO, todos mis amigos tenían carritos de golf, entonces nos juntábamos siempre a jugar al futbol o a ir a una casa. Extraño tanto a todos mis amigos y amigas que me hice allá, pero estoy tan feliz de haberlos conocido, fue por lejos la mejor decisión que he hecho en mi vida.

Mis familias me llevaban a safaris, restaurantes, andar en elefantes, jugar con los leones, andar en lanchas, jugar al bowling, ayudar a los chicos pobres, jugar con los monos, tocar jirafas. Fue una experiencia única y estoy completamente agradecido con mis padres por haber hecho todo esto posible.

Ahora estoy alojando a Gianluca, uno de mis hermanos de allá, el me alojo primero y yo lo invite y Thomas, quien también me alojo, lo está alojando Martin asique es muy bueno verlos acá todos los días, ya que nos hicimos amigos muy cercanos.

Atentamente

Luis María Videla